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¡Todos Los Días!

Todos Los Días. Si hubiera un “secreto” para mejorar cualquier área de tu vida, mejorar tu rendimiento o incluso que sea la puerta para que tu porvenir sea exitoso, ¿te gustaría conocerlo?

“Entreno religiosamente, TODOS LOS DÍAS”.
“La Monja de Hierro”

La respuesta es tan simple, que apenas se puede comprender que el ser humano en general no se percate de su existencia y lo ponga en práctica de manera habitual.

El “secreto” en sí, es que “si haces algo TODOS LOS DÍAS, se vuelve parte de tus hábitos cotidianos y por ende lo harás TODOS LOS DÍAS”.

Mi padre me aconsejaba: “los hábitos son algo que te acompañarán TODOS LOS DÍAS de tu vida, de modo que de ti depende que sean positivos o perniciosos”

En su caso, nunca tuvo oportunidad de estudiar formalmente dado que nació en un pueblito de la Mixteca Poblana; al llegar a la capital se propuso asistir de oyente a las clases de Derecho que se impartían en el Colegio del Estado ya casi para convertirse en Universidad de Puebla.

Varias veces me comentó que estudiaba y practicaba los términos de las diferentes asignaturas TODOS LOS DÍAS y que practicaba con escritos básicos sobre demandas de tipo mercantil, penal, civil o de cualquier otro tipo TODOS LOS DÍAS, analizando cada caso y visitando juzgados para aprender de primera mano secretos de la abogacía y así, TODOS LOS DÍAS hasta que los dominó.

Debido a que a menudo vencía en los tribunales a oponentes titulados y con mayor rango, entre sus amigos se ganó el apodo de “El Tierno”, dado que, a pesar de su aspecto juvenil, su aparente novatez y no contar con un título
universitario, sus oponentes no podían creer que perdieran continuamente sus casos ante él.

Durante su vida profesional fungió como Juez calificador, Alcaide de las Cárceles Municipales y se hizo de cierta fama al ganar casos peliagudos que parecían no tener salida, simplemente practicando TODOS LOS DÍAS lo que aprendió en su juventud.

A estas alturas, ya te puedes comenzar a imaginar hacia dónde se dirige esto. Déjame darte otro ejemplo que tiene que ver con la frase del inicio. “La Monja de Hierro” o la “Monja Ironman” son los motes con los que es conocida Madonna Buder, una religiosa nacida en San Luis, Missouri, hace 90 años. En Agosto de 2021 cumplirá 91. En el circuito “Ironman”, entre los corredores populares, es conocida, admirada y respetada.

No sólo porque alguien de su estatus -monja de clausura durante muchos años- se atreviera con una de las disciplinas más duras del planeta, sino porque su rendimiento deportivo dejó asombrada a la comunidad del triatlón: es la persona con más edad, 82 años, en cubrir la distancia “Ironman”, de hecho, le sobró media hora para librar el fuera de control.

A los 52 años se atrevió con su primer triatlón. La experiencia fue maravillosa para ella. Tanto que sólo tres años más tarde, a los 55, completó su primera distancia “Ironman”: 3,8 kilómetros a nado, 180 kilómetros en bicicleta y la maratón.

Cada vez que le preguntan cómo lo consigue, la monja corredora mezcla con buen humor sus dos pasiones: “Entreno religiosamente, TODOS LOS DÍAS”. Y así debe ser, porque desde entonces ha corrido 400 triatlones en diferentes
distancias, pero le ha cogido el gusto al “Ironman”, que ya ha completado 50 veces.

Ahora, ¿ya te queda claro cuál es ese secreto?

¿Qué crees que pasaría contigo si comenzaras a practicar lo que tienes en mente TODOS LOS DÍAS, en lugar de solo los días en que te sientes genial?

Es decir, no solamente cuando te apetezca, no solamente cuando tengas tiempo libre, no cuando se te ocurra o te llegue la inspiración, sino, TODOS LOS DÍAS.

¿Te das cuenta de que el secreto reside en tres palabras poderosas? ¡TODOS LOS DÍAS! Esa es la fórmula secreta para salir de tu zona de confort y mejorar tu rendimiento. Si solo cepillaras tus dientes una vez a la semana, ¿qué tan saludables crees que serían?

No creo que serían saludables para nada, ¿verdad?, de modo que, cepillas tus dientes diario.

¿Por qué no ponerle la misma atención a tu éxito? Si comienzas a practicarlo TODOS LOS DÍAS, entonces lo conviertes en un hábito que se convertirá en parte de ti.

Por otro lado, si estás esperando que sea 1° de Enero o que todo sea perfecto, nunca empezarás. De manera que, toma una decisión, sé valiente y comienza a poner en práctica lo que sea que quieras hacer; no olvides que esto implica el compromiso de ser persistente, perseverante y hacerlo con pasión.

*Winston Samuel Ojeda es mexicano de nacimiento y tiene más de 30 años de experiencia impartiendo conferencias y seminarios de superación personal. Su oratoria impactante y amena, abarca temas que se relacionan con el crecimiento personal, el liderazgo, la familia y el Network Marketing.

Tú Escenario de Vida

Autor: Winston Samuel Ojeda. Blog: Tú Escenario de Vida.

El inicio de la Primavera es un buen pretexto para plantearse nuevos retos, sobre todo porque con la contingencia que agobia a muchos de nuestros congéneres, estamos viviendo una época repleta de desafíos y transformaciones, no obstante, hay un sentimiento que aflora en nuestro ser al observar el renacimiento en general de la Naturaleza que nos rodea, el canto de los pajarillos y el calorcito que empieza a sentirse por doquier.

Me interesa el futuro porque es el sitio donde voy a pasar el resto de mi vida.
Woody Allen

Para reflexionar sobre lo que queremos conseguir o sobre aquello que nos gustaría cambiar en el escenario de nuestra vida, es necesario proceder de una forma sencilla, es decir sin grandes complicaciones, basándonos en lo más esencial, dado lo cual nos enfocaríamos en 7 grandes áreas a saber:

  1. Cuerpo: vacaciones, salud, practicar algún deporte, alimentación.
  2. Relaciones: amistades, reuniones, amigos, clubes.
  3. Espiritualidad: Dios, meditación, lectura.
  4. Familia: esposo, esposa, hijos, padres, hogar.
  5. Mente: aprendizaje, aficiones, viajes, cursos
  6. Negocios: dinero, emprendimientos, inversiones, ingreso residual
  7. Servicio: aportaciones, Naturaleza, voluntariado, adopciones.

El planear tu escenario de vida reside en hacer una revisión de los distintos aspectos en cada uno de los segmentos seleccionados, de ese modo, podremos valorar nuestra situación actual y la que nos gustaría alcanzar en un futuro determinado.

Sería algo así como una introspección, que te permita valorar de una manera sincera en dónde requieres poner más atención para mejorar sustantivamente.

No tiene que ser nada complicado, simplemente hay que buscar un espacio silencioso que te permita mirar hacia dentro de ti y calificarte sin intentar ser muy severo, pero tampoco poco comprometido, ya que la idea es que esos parámetros sean lo más cercanos a la realidad que vives.

Por eso creo que el inicio de esta estación del año es una buena excusa para comenzar esa evolución que te hará un mejor ser humano.

Como mencioné anteriormente, el primer paso para establecer tu escenario de vida es escudriñar dentro de ti para saber si realmente estas buscando mejorar o si no sientes la necesidad de hacerlo, no obstante, si has continuado leyendo y has llegado hasta aquí, solamente necesitas un empujoncito adicional para continuar con el proceso.

En el asunto que nos ocupa, muchas personas, podrían decantarse incluso por algo más concreto, como aprender a manejar una nueva aplicación en línea, dominar otro idioma, iniciar un nuevo curso o cualquier otra actividad que requiera un esfuerzo para mejorar su bagaje intelectual.

La selección que hagas ya es una pista para observar a qué asuntos les das más importancia, sin embargo, en este procedimiento vamos a continuar con la evaluación de las áreas mencionadas en un principio.

Una vez que ya sabes cuáles son las áreas por investigar, procedes a calificarte del 1 al 10 de acuerdo con tu nivel de satisfacción actual en donde el 1 es nada satisfecho y el 10, plenamente satisfecho.

Pongamos por caso que has valorado con un 4 el apartado dedicado al cuerpo, siendo éste el segmento con la calificación más baja y con un 5 la familia, siendo en este caso el segundo segmento con otra calificación no muy buena; es ahí donde tomas la decisión de hacer un cambio en esas dos secciones, porque no conviene centrarse en todos los conceptos al mismo tiempo, eso sería poco práctico.

Una vez que has seleccionado las dos áreas, define tu plan de acción en cada una de ellas. Pueden ayudarte dos preguntas: ‘¿qué voy a hacer para mejorar?’ y ‘¿qué voy a dejar de hacer para no claudicar?’. En este caso también te servirá concientizarte a través de estas interrogantes.

Lo siguiente es escribirlo, luego ponerlo en un lugar que veas con frecuencia y comprometerte a cambiar los hábitos que sean necesarios para lograr alcanzar tu objetivo. Pasado un tiempo, revisas los avances y reinicias el proceso de escalamiento.

Una vez completada la operación, podrás verificar cómo queda tú escenario de vida. El resultado también te dará una pista de lo armoniosa que es tu existencia; por otro lado, si es posible, sería interesante comparar tus resultados con los del resto de tu familia.

El siguiente paso consiste en puntuar el nivel que deseas alcanzar en los próximos meses, siendo importante que no intentes puntuar todo con un 10, porque eso sería poco realista.

En este punto, debes valorar con sinceridad los elementos que piensas mejorar, ya que, si bien es importante esforzarse lo más posible, tampoco se trata de escalar hasta el 10 en cada uno de ellos; muchas veces el simple hecho de mejorar un par de puntos hace que tu vida cambie para bien, de modo que no te pongas pruebas que por tortuosas sean difíciles de alcanzar.

En el caso del ejemplo, si has puntuado con un 4 el cuerpo y después del plazo fijado alcanzas 6, 7 o más habrás dado un paso importante para continuar con tu ascenso en otra temporada venidera.

En ese futuro que avizoras, vas a lograr enriquecer el escenario de tu vida, ya que es obvio que habrá más equilibrio en este nuevo escenario que en el anterior, siendo que has ascendido de lo “normal” a lo armonioso en cada una de las áreas escogidas.

El ejercicio también te ayuda a conocer tu nivel de compromiso, ya que hay personas más ambiciosas que otras.

Observa claramente que el trabajo que desarrolles en cada una de las áreas se centre en mejorar tus más elevadas aspiraciones para independiente de lograr sobresalir, puedas regresar a la sociedad algo de lo recibido y aprendido en forma de voluntariado, aportación o servicio.

De esta forma, no solamente serás un hombre especial o una mujer valiosa, si no un ser humano que presuma de no ser una carga, sino por el contrario, un individuo que aporta lo mejor de sí para tener un mundo mejor.

Recuerda que solamente puedes ayudar a los demás si te ayudas primero a ti mismo; pues bien, éste es un buen primer paso para lograrlo. ¡Felicidades!

*Winston Samuel Ojeda es mexicano de nacimiento y tiene más de 30 años de experiencia impartiendo conferencias y seminarios de superación personal. Su oratoria impactante y amena, abarca temas que se relacionan con el crecimiento personal, el liderazgo, la familia y el network marketing.

Envía tus comentarios a: hola@claroquesisepuede.com

Sobreponiéndote a las Dificultades de la Vida

Por: *Winston Samuel Ojeda. Blog: Sobreponiéndote a las Dificultades de la Vida.

Autor del libro: “¡Claro que Sí se Puede!”

Para muchas personas como tú, que acostumbras a trabajar con metas a veces la vida te pone obstáculos o dificultades que parecen insalvables – por ejemplo, un logro que no alcanzas- o inclusive te ponen en situaciones difíciles de tipo personal, -como la muerte de un ser querido- que te deprimen y pueden servir como pretexto para dejar a un lado tus objetivos.

Cualquiera que sea la causa de tu frustración, debes aprender a lidiar y encarar dicha adversidad. Hay situaciones que no se pueden cambiar y lo mejor es que te des cuenta de que no está en tus manos la oportunidad de revertir esos sucesos.

Por tal razón, antes que nada, debes reconocer que nadie mejor que tú mismo para automotivarte y dejar atrás, esa mala experiencia, sin permitir que te robe la mente.

No basta con tener buenas intenciones, es necesario que tengas empaque y que reconozcas que, si se trata de una meta personal, la realidad no miente y es necesario que hagas ajustes a la mecánica que estás utilizando para conseguir tu empeño. 

Fíjate bien, que al decirte que, si te percatas que algo no está funcionando, no dije que debes renunciar, dije que debes hacer ajustes o de plano cambiar de estrategia, pero siempre teniendo en mente que no debes claudicar. 

Debes recordar que el camino al éxito, está plagado de obstáculos y solamente se logra lo que se quiere, derribándolos. Solamente no triunfa, el que no lo intenta. 

Por eso me encanta el ejemplo del reportero entrevistando a Thomas Alba Edison enfrente de un grupo de curiosos, – es más, lo puedo imaginar- en donde aquél cuestiona al inventor, que, si no se siente avergonzado por la cantidad de fracasos que lleva, intentando crear la bombilla eléctrica, -que para entonces sumaban 1,012-, a lo cual Edison responde bonachonamente. “No mi amigo, no solamente no me da pena, al contrario, me regocija. ¿Por qué? Porque ahora ya conozco 1,012 maneras en que NO FUNCIONA la bombilla eléctrica. Una respuesta llena de simple sabiduría.

Así, que, si has intentado 5, 10, 15 o más veces conseguir tus metas y no las has concretado, visualízate como si ya las hubieras logrado, no desperdicies tu tiempo en banalidades y busca la manera de “atacar” tu objetivo con la ayuda de tu mente, que en conjunción con el Universo se confabulan para que lo logres. 

La preparación es vital, ya que como bien sabes, “conocimiento es sinónimo de poder”. En este caso no me refiero al poder por el poder, sino a “tu capacidad personal” de saber que puedes lograr lo que te propones. Dicho en otras palabras, tienes que “sentir” dentro de ti, que lo que te estás proponiendo puede hacerse realidad y el primer lugar donde debes verlo es en tu propia mente, agregando el ingrediente principal; el creerlo al 100% dentro de ti. 

Hay un refrán que dice: “El que persevera, alcanza”, dicho que refleja la sabiduría popular, de que todo es posible si se intenta una vez y otra vez y las veces que sea necesario. Así como la gotita de agua, que gota a gotita, finalmente es capaz de perforar la roca. 

Es así, que cada noche antes de dormir, debes verte en la posición triunfadora que te has imaginado, visualizándote una y otra vez, sin asomo de cualquier duda, la cual, en todo caso, debes desechar al instante. 

Deja que tu subconsciente trabaje por ti mientras duermes. Descansa con una sonrisa a flor de labio y con la confianza de que al visualizarte una y otra vez en la manera que quieres, la vida te dará lo que deseas. No lo dudes; no temas nada, solo hazlo y derrama confianza, para que se concrete.

Muchos sucesos históricos, nos demuestran con su realidad, que poco se puede hacer ante el empuje y el deseo de un ser humano determinado a conseguir lo que se propone. Siente, cree, busca; investiga; lee sobre los sueños hechos realidad de tantos hombres y mujeres que te han antecedido en su paso por este mundo y gracias a los cuales, puedes disfrutar de una tecnología, que hace algunas décadas, parecía imposible.

Para finalizar, déjame compartir contigo una analogía para pensar detenidamente. Que no te suceda lo que a aquel individuo que, al morir, sobre su lápida escribieron: “Aquí yace un hombre que nació en 1955, murió en 1998 y lo enterraron en el 2016.

Y te preguntarás, cómo qué murió en 1998 y lo enterraron hasta el 2016. Bueno pues, lo que sucede con este tipo de gente, es que o se topan con un obstáculo, o la vida les presenta una serie de dificultades y lo que hacen es que “tiran el arpa” y ya solo vagan por el mundo, en calidad de seres fantasmales, esperando que “La Parca” se los lleve lo antes posible. 

Son como muertos en vida, que solo “arrastran la cobija” e intentan vivir de la compasión de los demás. De hecho, no viven, sólo vegetan y si pueden te “chupan” la vida, dándote “consejos” siempre llenos de amargura y de cómo no se pueden lograr los sueños. 

De manera tal es que no te conviertas en uno de “esos perdedores”, ten un propósito en la vida, busca alicientes adicionales, visualízate ganando y piensa que Dios no te pondría los obstáculos que tienes ahora, si no supiera que los puedes superar.

De alguna manera el cúmulo de experiencias que has tenido en tu existencia, no son más que parte de los ingredientes con los que lograrás concretar ese sueño maravilloso que quieres convertir en realidad. 

¡Si tú quieres, tú puedes! ¡Usa toda tu fuerza!, ¡La “Mente Maestra” está contigo!

*Winston Samuel Ojeda es autor del libro: ¡Claro que Sí se Puede!, tiene más de 30 años de experiencia impartiendo conferencias y seminarios de superación personal. Su oratoria impactante y amena, abarca temas que se relacionan con el crecimiento personal, el liderazgo, la familia, el desarrollo directivo y las redes de mercadeo.

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